Andrés Mecha

Han sido dos días de dura pulseada en el Congreso durante el tratamiento de la ley ómnibus o mejor dicho ley tanqueta. Después de arduas negociaciones y modificaciones que no alteran el carácter regresivo de la ley, el gobierno se prepara para aprobarla en general, con el apoyo del PRO, que es una suerte de oficialismo blue, y la oposición colaboracionista formada por la UCR y el bloque comandado por el ex PJ y ex JxC, Miguel Ángel Pichetto.

En las afueras, mientras tanto, la inefable represora Bulshit desplegó un dispositivo totalmente desmedido, con el propósito de impedir el derecho constitucional a la protesta y generar conmoción social. Enormes columnas verdes y azules en formación marcial, repartiendo palazos, balas de goma y gases lacrimógenos que producen quemaduras. Las imágenes se multiplican por las redes y canales noticiosos. Carros hidrantes, escudos, las motos en las veredas, golpes a ancianos, a un hombre en silla de ruedas, a quien pase por el frente de las desbocadas ratas con botas. Decenas de detenciones arbitrarias, como la que sucedió el miércoles a las militantes de la UCR (!!!!) que cantaban el himno. Más de 25 trabajadores de prensa heridxs con perdigones en distintas partes del cuerpo. Las fuerzas de seguridad celebrando su festival de «libertad» para reprimir. Las libertades democráticas, en cambio, diluyéndose en vivo y en directo.

El nuevo clima anti libertades se vivió también en las provincias. En Mendoza detuvieron a dos militantes del FIT-U por participar de las protestas del miércoles. A uno de ellos lo fueron a buscar a su propia casa… Mientras que, en Rosario, este jueves por la noche detuvieron a 7 personas por pintar un mural. Todo este ambiente ha quedado sintetizado en esas imágenes infantiles creadas con inteligencia artificial (IA) que tanto conmueve a los seguidores de Milei. Justamente, este jueves el presidente posteó en redes sociales una imagen de un león custodiando una enorme jaula, hacia la que se dirigen miles y miles de personas con banderas argentinas. De fondo se ve el congreso, vallado. He ahí la curiosa libertad que ofrecen los liberfachos: garrote y calabozo. No resiste dobles lecturas. En su corta carrera política no sido la sutileza un don característico del energúmeno clonador de mastines.

En estos días se define mucho. La ley, aun desguazada, es totalmente regresiva y nos afecta en todos los aspectos de la vida. Con este larguísimo mes y medio de gestión ya hemos tenido una muestra gratis de lo que es este neomenemismo videlomacrista gobernando. Ni una sola medida para el pueblo. Y al que no le gusta, garrote. En este sentido resulta «llamativa» la pasividad de la CGT, la CTA y el grueso de las organizaciones peronistas. Si bien los legisladores de UxP se están oponiendo a la ley (excepto los tucumanos que canjearon sus votos por la ley Ledesma), la disputa también está en las calles. Resulta vital derrotar esta ley nefasta, entreguista, saqueadora y antilibertades, y el estado de sitio de hecho que está desplegando el ministerio de seguridad en todo el territorio.

El gobierno pierde aceleradamente su imagen positiva y por ello también busca apurar el tratamiento de este mamotreto antijurídico que puede generar daños irreparables. Resulta imprescindible y urgente otra medida unificadora de los sectores subalternos como fue la huelga general.

¡A resistir, a derrotar el saqueo y la represión!

¡No a la ley Ómnibus y al DNU!

¡No a las facultades delegadas!

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