Entrevista a Guillermo, del Frente Popular Darío Santillán, Corriente Plurinacional en la Coordinadora por el Cambio Social
1- Nos da la sensación de que la ofensiva del gobierno contra las organizaciones sociales viene in crescendo desde que, hace algunos meses, la vicepresidenta Cristina Fernández de Kirchner planteó la necesidad de terminar con la “tercerización” de los planes sociales y avanzar hacia una gestión “estatal” de los mismos, por medio de los intendentes. ¿Esto es así? ¿Con qué te parece que tiene que ver esa ofensiva?
La ofensiva se debe a una serie de razones, a mí entender. La primera es que empezamos a atravesar un cambio de etapa, lo que implica que las actuales ofensivas cuentan con el consenso de un amplio sector de la población que se fue corriendo a la derecha, y que el “piquete, cacerola, la lucha es una sola”, giró a “planeros vagos, hay que sacarlos de la calle a como sea”. Los cambios de etapa no suelen ser bruscos, sino, procesos que van marcando la tendencia de para dónde va girando la sociedad. El problema es que las organizaciones, por estar atravesadas por la urgencia, no nos damos el tiempo para pensar esta situación, o lo que es peor, creer es que más de lo mismo, en relación a los ataques al movimiento piquetero. Esto no puede separarse de que se da al mismo tiempo que la derecha gana la calle y se presenta como alternativa. Eso obliga a la dirigencia política a correrse más a la derecha, para no perder espacio y así no incomodar a su electorado.
El otro elemento es el aislamiento del movimiento piquetero. En diferentes momentos, este movimiento tenía legitimidad y consenso para el reclamo, pero ahora la lucha sectorial lo llevó a perder consenso y, aunque sus acciones son masivas, es a la vez un sector con una gran fragilidad para enfrentar estas ofensivas. El cambio de etapa también es que la derecha aprendiera como solucionar el conflicto social. Es decir, no te matan como en Avellaneda, sino que montan una campaña de estigma para luego esperar que la sociedad pida a gritos que te metan en cana.
2- El reemplazo de Zabaleta por Tolosa Paz en Desarrollo Social, después del importante acampe de tres días de la UP, primero pareció abrir alguna expectativa, con una serie de compromisos firmados al retirarse por el ex intendente de Hurlingham, después de una gestión qué durante meses no hizo más que atacar a las organizaciones. Pero en las últimas semanas las negociaciones con la ex diputada también parecen haberse empantanado, con toda una serie de incumplimientos y dificultades para el diálogo. ¿Qué podés contarnos al respecto?
Las negociaciones hay que verlas en el marco general de la situación del gobierno. La última reunión donde se acordó con Zabaleta, éste ya había renunciado, a tal punto que levantamos el acampe sin tener un interlocutor válido, y luego de idas y vueltas nos reunimos con la nueva ministra, quien prometió cumplir el acuerdo con Zabaleta, pero eso ocurrió parcialmente, y esto se da porque les garpa tener un discurso anti-piquetero. Y, sobre todo, la feroz interna del gobierno, donde cada área está cercada por distintas facciones que integran el FdT, en las que cada una de estas actúa defendiendo su sector (a esto agregarle lo inoperantes que son). Esto lleva a que las negociaciones sean día a día, y los acuerdos se hacen inestables.
3- En los últimos días se difundieron mediáticamente una serie de denuncias sobre beneficiarios de planes que compraron dólares, el pago de planes a muertos, etc. ¿A qué responde esta campaña? ¿Cuál es la respuesta de la Coordinadora por el Cambio Social?
Es parte de una campaña de estigmatización en la que van viendo lo que pasa mediáticamente, y con eso endurecen su discurso, favoreciendo la embestida (incluso la judicial), la Coordinadora por el Cambio Social (CxCS) rechaza esta ofensiva, donde el fondo del asunto es el ajuste, y buscan mostrar que las bajas de los programas se deben a compra de dólares, mientras los índices muestran las catástrofes para los sectores populares debido a las políticas sociales, y la prueba de ello son los tres ministros en tres años.
4- ¿Qué perspectivas ven hacia el fin de año, un momento tradicionalmente intenso para el sector, y hacia el año que viene?
Diciembre, todos los años, suele ser un mes caliente. La particularidad de este año es el 100% de inflación, crecimiento de la indigencia, se redujo la entrega de alimento, los nexos, que son el refuerzo del ingreso de las compañeras no se está concretando. Esto es que vamos a un fin de año más tenso si no se atienden las necesidades de las compañeras.
Lo que se viene, sobre todo en un año electoral, para el movimiento piquetero, va a haber fila para pegarle y proponer como acabar con el sector. El desafío será construir consenso para fortalecer el derecho al reclamo, pero esto solo será posible si logramos ser parte de las luchas, así como también sumarnos a las luchas que se dan por fuera de nuestro sector. Ahí se encuentra la necesidad de construir espacios más amplios que nos interpelen e interpelen a otres, ya que solos, quedó claro que no alcanza.