Por mail y antes del fin de semana largo de Semana Santa, el gobierno de Milei busca dejar a 15.000 personas sin trabajo. Miles de trabajadorxs se enfrentan a la incertidumbre de cómo mantener sus ingresos, llegar a fin de mes, pagar el alquiler y mantener a sus familias. En el marco de un desgüace general y profundo del Estado, ejecutan el odio que prometieron en campaña festejando los despidos desde las cuentas oficiales. Ante la audiencia del IEFA LATAM FORUM, foro económico con gran presencia de empresarios, aclararon también que es solo el principio y que su objetivo es llegar a los 50.000 despidos.

El discurso de los “ñoquis” y el consenso social sobre el ajuste en el Estado

El gobierno de Javier Milei ejecuta un discurso de odio basado en mentiras sobre el rol de lxs trabajadorxs del Estado. Esta avanzada que comenzó durante el gobierno de Mauricio Macri hoy tiene una cara mucho más profunda solo comparable con el proyecto de vaciamiento del Estado del menemismo. Hace años que crece un discurso ante el ajuste y la precarización de las condiciones de vida en el que grandes medios de comunicación y dirigentes políticos logran convencer a sectores del pueblo que los responsables de que lxs trabajadorxs cada vez laburemos más y ganemos menos son los “ñoquis” y la gente que vive de los “planes del estado”.

Dentro de los despidos se encuentran compañerxs que ingresaron del 2020 a esta parte y aquellxs que se encontraban con contratos precarizadxs que vencían el 31 de Marzo. También, compañerxs a punto de jubilarse y el conjunto de aquellxs que entraron por la Ley de Cupo Laboral Travesti-Trans. Así, ejecutan despidos con un claro sesgo político eliminar las políticas públicas que puedan ponerle algún tipo de freno a quienes vulneran derechos laborales. Salteándose una Ley Nacional (cupo travesti-trans) avanzan con su perspectiva de golpear a uno de los sectores más vulnerados de nuestra sociedad y avanzar sobre las conquistas de diversidades y disidencias.

A  excepción de la represión todo lo que tiene para mostrar el gobierno de Milei es un fracaso. La inflación sigue licuando los salarios, le dieron curso a un tarifazo que aumentó los servicios y el transporte público de manera indiscriminada, crece la pobreza, la desocupación y la indigencia y no se ve un repunte económico en el corto plazo. Sin embargo, desde su lectura, tienen en lo inmediato consenso social para avanzar con los ajustes en el Estado. Mientras todo lo demás es un desastre ejecutan una de sus principales promesas de campaña vaciando Ministerios, Secretarías y todo tipo de dependencias estatales.

Un despido en el Estado es un ataque a una política pública que beneficia a todo el pueblo

Es importante que discutamos de cara a la sociedad que la lucha contra el vaciamiento del Estado no es una defensa en abstracto de los puestos laborales. No estamos defendiendo estos lugares porque sí sino que los trabajos en el Estado son la forma de materializar políticas públicas que lleguen a las personas y transformen su realidad. En el caso particular de los despidos en Trabajo se trata de cientos de laburantes que trabajan en la promoción del empleo, fiscalización del trabajo y sus condiciones bajo los derechos que corresponden y seguridad social, por nombrar las principales tareas de la entidad. Lo mismo se podría mencionar de muchas de las áreas que fueron recortadas.

Así, cada uno de estos despidos en el Estado es un ataque general al conjunto de la clase trabajadora en dos sentidos. El primero se explica a partir de que el Estado se pone como el iniciador de los despidos masivos. En este sentido, si es el mismo Estado quien arranca esta tarea, deja el camino abierto a los sectores privados (sobre los cuales existe menos control) para practicar despidos y violaciones de los derechos laborales de la manera que quieran. El segundo, es político y consiste en que con cada uno de estos despidos el gobierno elimina la posibilidad de acceder a políticas públicas para el conjunto del pueblo.

Aquel video en viral en que el ahora presidente Javier Milei gritaba “¡Afuera!” arrancando los papeles con los nombres de los Ministerios fue el comienzo de un proceso de vaciamiento del Estado. Por citar un ejemplo, los despidos que hoy se producen en la Secretaría de Trabajo tuvieron como antesala la degradación de la categoría Ministerio a la Secretaría y la unificación con el Ministerio de Capital Humano dirigido por Sandra Petovello. Este Ministerio, nombrado por el presidente como el único que “tiene caja” está dirigido por una persona de su confianza y concentra la tarea de muchos Ministerios y áreas del Estado generando una estructura gigante de la que una sola persona es capaz de dirigir correctamente. Petovello no  es la encargada de garantizar todas las políticas que se hacían previamente sino que es la encargada de ejecutar el vaciamiento. Particularmente el área de la Secretaría de Trabajo, por su parte, se encuentra conducida por uno de los responsables del Grupo Techint. Esto es una clara ilustración de cómo el gobierno de La Libertad Avanza piensa las políticas públicas de empleo: nulas y al servicio de los grandes grupos económicos.

¿Cómo enfrentarlo?

Lxs laburantes estatales preparan un ingreso masivo de los compañerxs despedidxs a las oficinas para pelear por su reincorporación. Es importante que esta lucha que emprenden lxs delegadxs, comisiones internas y sindicato pueda confluir con otros sectores que se encuentran enfrentando amenazas o despidos como lxs trabajadorxs de Télam o de las tercerizadas de Aerolíneas Argentinas. A los reclamos se suman también el rechazo al DNU, la anulación del protocolo anti-movilizaciones y el pedido de aumento salarial que supere la inflación, entre otras reivindicaciones principales. 

Reincorporación de lxs compañerxs despedidos

Defendemos las políticas públicas: no somos casta somos trabajadorxs

Por la unidad de todas las luchas

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